Es necesario y urgente construir una nueva cultura: “
Es con este fin que trabajamos desde cualquier Club de Guardianes. Como espacios de confianza donde decir Naturaleza, Paz, Amor, Gracias, Armonía, Por favor y demás palabras tan poco celebradas, no sea un riesgo o una utopía. Durante estos cuatro años pude comprobar que los niños están sedientos de escuchar y pronunciar estas palabras solo que no encuentran el medio apto o el lugar donde soltarlas. Nuestro Club es ese espacio abierto. Cuando nos reunimos simplemente somos, nos relajamos, no solo porque estamos entre amigos sino, sobre todo, porque ENTRE NOSOTROS ES LICITO QUERER SER BUENO, entre nosotros es natural defender un pájaro de las gomeras , entre nosotros es común el compartir como en una pequeña comunidad, entre nosotros es grato el admirar la belleza de un insecto o de una hoja. Y es tan maravilloso ver la bella esencia de los niños manifestarse con soltura, abandonando todos esos temores, ayudándose unos a otros a crecer sin imitaciones abrazando
Es esa sensación de confianza la que gestó este Club y la que a esta altura ya lo convirtió en autónomo. Cuando comenzamos los encuentros del año 2008 nos propusimos un objetivo: viajar. Nos dijimos ¿Qué paisajes queremos conocer? Los primeros lugares que surgieron fueron Bariloche, Mar del Plata, París… terminamos aceptando que nuestras intenciones no coincidían con nuestras finanzas y optamos por viajar a Paraná (Entre Ríos). Como para este viajecito también precisábamos dinero decidimos armar una obra de teatro y durante todo el año trabajamos para representarla: haciendo la utilería, diseñando los trajes, reflexionando sobre el mensaje de nuestro montaje, memorizando textos y coreografías como actores profesionales. Finalmente estrenamos nuestra obra en “
Por Mónica L. Alvarez, coordinadora del Club “Madre Tierra” que funciona en
No hay comentarios:
Los comentarios nuevos no están permitidos.